Erwin Miyasaka: las marionetas protagonizan las artes dramáticas en Japón

Erwin Miyasaka: las marionetas tradicionales son coloridas y diversas.en su estilo

El teatro de marionetas es una modalidad de las artes escénicas más importantes en Japón, consiste en la representación de narrativas dramáticas ejecutadas a través de muñecos o títeres que son manejados por dos o tres personas, mediante cuerdas de más de dos metros de largo, dirigidas desde un tablero de control, que está ubicado en la parte superior del escenario.  

Erwin Miyasaka: existen marionetas más extravagantes que otras.

En Japón se conoce al teatro de marionetas como "bunraku" y actualmente forma parte de las alternativas de entretenimiento más populares de la nación asiática, debido a que los muñecos utilizados representan la idiosincrasia nipona.  Las marionetas son hechas de madera y vestidas con telas que asemejan la indumentaria de hombres y mujeres, por lo que es común representar a un samurai, una geisha, un emperador o una bailarina, entre otros personajes. 

El teatro de marionetas, en su forma más tradicional se desarrolla sobre un escenario, en el que se fija una especie de corredor con barandas de madera, sobre el cual se asoman los muñecos. La cantidad de titiriteros varía de acuerdo al personaje que representen, por lo general las marionetas de mayor importancia dentro de la historia son manejadas por tres personas que están a la vista del público.

• El maestro: es el encargado de dar movimientos a la parte superior de la marioneta, es de la cabeza y el brazo derecho. 
• Primer ayudante: da movilidad al brazo izquierdo de la
• Segundo ayudante: genera movimientos en los pies del muñeco. 

Erwin Miyasaka: las marionetas también son utilizadas en presentaciones callejeras

Durante la ejecución del teatro de marionetas, se combinan elementos musicales con la voz de un narrador omnisciente encargado de relatar la historia y transmitir a los espectadores una carga efusiva y emotividad.

Desde el año 2008, el teatro de marionetas forma parte de la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y por siglos ha sido uno de los valores artísticos de Japón.  

Por: Erwin Miyasaka